Durante cinco semanas consecutivas, voy a repasar una serie de artículos que escribí en 2003 acerca de las filosofías de los colores. Primero analicé el blanco ("La gran senda blanca, revisada"), luego revisé el azul ("Azul real, revisado"), la semana pasada llegó el turno del negro ("En números negros, revisado") y hoy le toca al rojo.

En estos artículos estoy respondiendo a las mismas seis preguntas que usé en los textos originales, pero aportando perspectivas actualizadas con la experiencia de los últimos doce años. He aquí las seis preguntas en cuestión:

• ¿Qué desea este color? ¿Cuál es su meta final?

• ¿Qué medios utiliza este color para alcanzar sus fines?

• ¿Qué es importante para este color? ¿Qué representa?

• ¿Qué desprecia este color? ¿Qué lo impulsa negativamente?

• ¿Por qué le gustan sus aliados y odia a sus enemigos?

• ¿Cuáles son el mayor punto fuerte y la mayor debilidad de este color?

Como este es el cuarto artículo de la serie, supongo que ya sabéis cómo funcionan.

¿Qué desea este color? ¿Cuál es su meta final?

El rojo quiere la libertad.

Todo el mundo parece estar dándole vueltas al sentido de la vida. El rojo no lo hace, porque él ya conoce la respuesta: el corazón te dicta lo que debes hacer; tan solo hay que escucharlo y actuar en consecuencia. No es ningún misterio, porque todos recibimos un bombardeo constante de sensaciones que nos guían por el camino correcto. El problema es que los demás colores ignoran este mensaje.

Impulso ardiente | Ilustración de Daarken

La vida es una aventura y cada persona tiene que experimentar la suya. La clave es prestar atención a tus emociones y dejar que te guíen. Si estás feliz, ríe. Si estás triste, llora. Si estás enfadado, pégale a algo. Si tienes miedo, huye. Escucha a tu voz interior y tendrás la ocasión de descubrir todas las cosas que la vida puede ofrecer.

Hay demasiada gente que se pasa la vida cuestionando las decisiones que ha tomado. El rojo, no. El rojo vive en el presente, es espontáneo y se lanza a todas las aventuras que se le presenten. Este color sabe que, en su lecho de muerte, podrá volver la vista atrás y recordar una vida plena y sin remordimientos. Eso es todo lo que el rojo quiere: la posibilidad de vivir haciendo lo que le plazca.

Eso no significa que el rojo viva por su cuenta, sino todo lo contrario. Relacionarse con los demás forma parte de la vida. El rojo sabe lo que son la pasión, la lealtad, la camaradería y el deseo. Cuando estrecha un vínculo con los demás, lo hace con afecto y determinación. Ya se trate de un amante o un amigo, el rojo es de los que siempre estarán ahí cuando les necesites. Bueno, salvo que la vida le lleve a otro lugar durante un tiempo... Pero cuando regrese, ahí estará.

Los desconocidos podrían pensar que el rojo es un poco caótico, pero eso se debe a que no entienden lo que alberga su corazón. No pueden sentir las emociones que guían al rojo. Vivir la vida al máximo requiere mucha dedicación y perseverancia, pero el rojo siempre está dispuesto.

¿Qué medios utiliza este color para alcanzar sus fines?

El rojo es un color activo. Según él, si quieres algo, tienes que dar pasos constantemente para alcanzar tu objetivo. No puedes cruzar la línea de meta si no participas en la carrera. El rojo logra sus propósitos porque se esfuerza por hacer que las cosas ocurran y toma medidas que lo garanticen.

Matón del anillo mágico | Ilustración de Karl Kopinski

Uno de los factores principales de esto es que el rojo está muy en sintonía con sus sentimientos. Siempre sabe cuál es el siguiente paso que debe dar, porque escucha lo que le dicta su corazón. De este modo, nunca se queda sin una dirección que seguir. Ahora bien, ese rumbo puede cambiar, ya que el corazón es voluble (y mucho, a veces), pero este color siempre está listo para actuar.

El rojo dispone de diversas herramientas. En primer lugar, cuenta con recursos para ser destructivo cuando lo necesita. Si algo le ocasiona problemas, puede volarlo por los aires. O reducirlo a cenizas. O destrozarlo con toda clase de métodos. Al rojo no le da miedo ensuciarse las manos y nunca retrocede ante un desafío.

El rojo también tiene la velocidad de su parte. Su carácter impulsivo le permite actuar al instante y sin tener que pararse a pensar en sus acciones. Este color es capaz de golpear rápido y fuerte antes de que los demás puedan prepararse siquiera.

El rojo también es hábil manipulando emociones. Al igual que él siente cada impulso con fuerza, también puede prender la llama de las emociones en otros, a menudo con resultados inesperados.

El rojo puede ser muy artero. Su naturaleza tiene un carácter taimado que le permite interferir en los planes de los demás.

Este color también es incansable. Si tiene algún objetivo que le importe, no se detendrá hasta alcanzarlo.

Llamarada salvaje | Ilustración de Aleksi Briclot

La obstinación y las energías del rojo lo convierten en el color más impulsivo. Él sabe lo que quiere y actúa en consecuencia sin la más mínima duda. Interponerse entre el rojo y su objetivo puede resultar muy muy peligroso.

¿Qué es importante para este color? ¿Qué representa?

He aquí algunas cosas que el rojo considera esenciales:

Emociones: si vas a dejarte guiar por el corazón, es imprescindible formar un lazo con tus emociones. Y no solo con algunas, sino con todas. Magic es un juego orientado al combate, así que las sensaciones rojas que más se muestran son de carácter agresivo, pero el rojo obedece a todos sus sentimientos. Por otro lado, este color no reprime sus emociones, sino que las deja aflorar. Al rojo le encanta la acción, y las emociones son grandes fuentes de motivación.

Cambios de humor: el rojo no solo se centra en las emociones, sino que siempre se centra en muchas emociones a la vez. Eso significa que este color es más propenso que ningún otro a tener cambios de carácter. Por ejemplo, puede estar riéndose en un momento dado y llorar a lágrima viva instantes después. Otros quizá vean esto como falta de concentración y facilidad para distraerse, pero el rojo considera que es importante hacer siempre caso a tus sentimientos; y si eso significa tener cambios de humor, así debe ser.

Impulsividad: al rojo no le gusta detenerse a cavilar. Pensar requiere mucho tiempo y la ventaja táctica del rojo se basa en su velocidad y en su capacidad para tomar decisiones importantes inmediatamente. La mejor forma de conseguirlo es confiando en los impulsos y tomando la decisión correcta. Para eso, el instinto es mucho más veloz que el cerebro.

Actuar por impulso | Ilustración de Brad Rigney

Fuerza (solucionar los problemas a golpes): si hay que elegir entre dejar que la mente o el cuerpo resuelvan un conflicto, el rojo confía en sus puños, sin lugar a duda. Este color tiene mucha práctica en ese tipo de situaciones.

Violencia: el rojo prefiere las respuestas contundentes y una de ellas es la violencia física. Si alguien se mete en tu camino, tienes que atizarle hasta tumbarlo. Eso suele resolver los problemas... por un tiempo. Pero bueno, algo es algo.

Brutalidad: otros colores trazan una línea para distinguir lo que es aceptable y lo que no lo es. El rojo no ve tan clara esa distinción. Prefiere las soluciones amistosas, claro... Pero si hay que buscar otras más directas, no hay problema.

Destrucción: al rojo le gustan los planes fáciles de recordar, y si algo es un problema, hay una solución universal y sencilla: destruirlo. Para el rojo, la destrucción es un arte en sí, y quienes dominan ese arte tienen muchas menos cosas que les molestan.

Caos: el que usa esta palabra es el blanco, no el rojo. Él solo quiere que las cosas sigan su curso, pero claro, como estamos tratando con personas, las cosas suelen complicarse. Sin embargo, es en esas situaciones donde el rojo ve la belleza del mundo. Cada persona está viviendo su vida y, cuando diferentes vidas se topan unas con otras, empezamos a comprender la influencia de los individuos en el colectivo. Todo parece inconexo visto desde lejos, pero si profundizas en estas relaciones, descubres que las inconsistencias, la variedad y las imperfecciones otorgan una capa adicional de humanidad al mundo.

Aleatoriedad: la vida no es ordenada, así que ¿por qué habríamos de actuar como si lo fuese? Para encontrar la felicidad, hay que entender que las cosas no siempre suceden por un motivo. Por eso, el rojo ha aceptado que la aleatoriedad es un componente inevitable de la vida.

Espontaneidad: el rojo sabe que uno de los grandes placeres de la vida es la posibilidad de hacer lo que se quiere y cuando se quiere. Para que esto suceda todas las veces posibles, el rojo apoya la idea de que las cosas no tienen por qué planearse de antemano, sino que pueden surgir en el momento.

Humor: al rojo le encanta reírse y por eso es el color que más valora el humor y más se esfuerza por ser gracioso. Los otros cuatro colores tienen sus propios estilos de humor, pero ninguno es tan directo, desenfadado y divertido como el del rojo.

Travesuras: al rojo le encanta hacer cosas para divertirse y una de ellas es incordiar a los demás. Es muy gracioso ver cómo se pone la gente cuando las cosas no salen como se habían planeado.

Elementos del fuego y la tierra: el rojo aprecia el carácter volátil de estos elementos naturales (relámpagos, fuego, terremotos, avalanchas, etc.) y los utiliza muy a menudo como fuentes para hacer daño directo.

Peleas (alborotos): el rojo nunca rechaza una pelea, pero las que a él le gustan son las refriegas sin orden ni concierto, más que las batallas organizadas.

Encabezahorda trasgo | Ilustración de Matt Cavotta

Romance: al rojo le gusta hacer la guerra y el amor. Al igual que nunca rechaza una pelea, tampoco tiene miedo de expresar a los demás lo que siente por ellos. El rojo no tiene miedo a las relaciones, porque sabe que estos lazos íntimos con los demás representan algunos de los mejores momentos de la vida.

Hedonismo: el rojo aboga por obedecer a los sentimientos. Muchas veces, eso significa hacer cosas que quieres hacer porque son las cosas con las que disfrutarás. El rojo no se avergüenza de satisfacer estas necesidades básicas.

Barbarismo: una consecuencia de apreciar la acción por encima del pensamiento es que, a menudo, actúas de forma primitiva.

¿Qué desprecia este color? ¿Qué lo impulsa negativamente?

Al rojo no le gustan la frustración y el aburrimiento. La frustración ocurre cuando alguien trata de decir al rojo que no puede hacer lo que quiera. La respuesta típica del rojo es hacerlo igualmente y, si algo trata de detenerle, buscará la manera de eliminar ese obstáculo. Al rojo le gusta considerarse una fuerza imparable que seguirá adelante hasta conseguir lo que quiere.

Alesha, la que sonríe a la muerte | Ilustración de Anastasia Ovchinnikova

La otra cosa que más le fastidia es la monotonía. El rojo es el color de la acción, de modo que la inacción lo pone de los nervios. El rojo no tiene paciencia ni planes a largo plazo, así que lo último que querría hacer es no hacer nada. El rojo prefiere lanzarse a por un objetivo y fracasar estrepitosamente, antes que estarse quieto y no actuar.

¿Por qué le gustan sus aliados y odia a sus enemigos?

El rojo ve al negro como un color que se guía por su voz interna, no por las externas. El negro también valora la capacidad de hacer lo que le plazca y entiende que la destrucción tiene importancia. Este color urde planes y conspira más de lo que al rojo le gustaría, y su egoísmo es incluso un poco excesivo, pero en general, el negro es un color con el que el rojo puede identificarse.


El rojo ve al verde como un color que se fía de sus instintos y sabe actuar sin tener que pensar las cosas, al igual que él. Otra característica que aprecia del verde es su lado salvaje. Además, este color es partidario de la "ley del más fuerte", un concepto que agrada al rojo. El verde tiene cierta preferencia por el orden y es un poco más sereno de lo que al rojo le gustaría, pero desde luego, se encuentra a gusto con él.


El rojo ve al blanco como un color que parece existir solo para complicar las cosas innecesariamente. Su obsesión con las normas y las leyes crea un sistema tras otro que están diseñados para impedir que el rojo haga lo que quiera. Peor aún, el blanco tiene las herramientas necesarias para imponer esa estructura. Lo más terrorífico de todo es que dispone de medios para aprisionar al rojo y de una infraestructura que le permite justificar sus actos falsamente. Esto representa el peor desenlace posible para el rojo: la total pérdida de libertad.


El rojo ve al azul como un peligro, porque este color vive para menospreciar el valor de los sentimientos. Si el azul se saliese con la suya, las personas serían autómatas sin emociones que nunca sabrían lo que es experimentar emociones puras. Además, parece que la misión del azul es conseguir que no ocurra nada. El azul pretende destruir el estilo de vida del rojo y matarlo de aburrimiento.

¿Cuáles son el mayor punto fuerte y la mayor debilidad de este color?

La mayor cualidad del rojo es su capacidad para saber qué es lo que quiere. El rojo tiene propósitos e ideas claras, además de la actitud adecuada para ponerse manos a la obra y lograr lo que quiere. Mientras que otros quizá sueñen con lograr cosas, el rojo toma las medidas necesarias para hacerlas realidad. Esta determinación proporciona al rojo una pasión y una presteza que suelen abrumar a sus adversarios. El entusiasmo del rojo crea una energía que le permite hacer cosas increíbles.

Furia de Sarkhan | Ilustración de Chris Rahn

La mayor debilidad del rojo es que no está dispuesto a pensar a largo plazo. El rojo se obceca con vivir el presente, trata de cumplir sus objetivos inmediatos y rara vez se para a pensar en las consecuencias de sus actos. Este color tiende a destinar todos sus recursos a un único plan, pero si este fracasa, el rojo puede meterse en problemas fácilmente. Por otro lado, se le da muy mal aceptar los consejos de los demás y prefiere actuar a su manera, incluso cuando todos los que le rodean le advierten del desastre que le aguarda.

Personajes alineados con el rojo en la cultura popular

Helena (Orphan Black)

Helena es el clon que prefiere actuar en vez de pensar. Nunca puedes anticipar lo que va a hacer, porque la propia Helena nunca lo sabe hasta justo antes de actuar.

Knux (Mad Max: Furia en la carretera)

A lo largo de la película, Knux toma decisiones dependiendo de su situación actual, porque solo puede centrarse en lo inmediato. Knux es un personaje guiado por sus emociones, por lo que su situación da muchas vueltas.

Mercurio (Vengadores: La era de Ultrón)

Pietro tiene el poder de la supervelocidad y eso le permite seguir sus impulsos mucho más rápido que un humano normal. Incluso aunque tenga la capacidad de pensar las cosas rápidamente antes de intervenir, nunca lo hace.

Las emociones (Del revés)

Alegría, Tristeza, Ira, Miedo y Asco. Todos estos personajes se guían claramente por un único impulso emocional (es que son emociones) y eso les lleva a tomar decisiones imprudentes que tienen todo tipo de consecuencias.

Mabel Pines (Gravity Falls)

Mabel siempre se deja llevar por sus caprichos. ¿Que hay que poner en peligro el continuo espacio-tiempo para tener una posibilidad de ganar un cerdito en la feria? ¡Hecho! Mabel se entusiasma con sus proyectos actuales o cada vez que conoce a un chico que le gusta... y las consecuencias suelen ser casi desastrosas para la gente que la rodea.

La Antorcha Humana (Los 4 Fantásticos)

Johnny Storm está siempre en llamas, tanto metafórica como literalmente. Este superhéroe es impulsivo, se mete en peleas y actúa sin meditar las cosas. Ah, sí, y también puede estallar en llamas.

Homer Simpson (Los Simpson)

Homer es una persona dominada por sus emociones y que siembra el caos allá por donde pasa. El padre de la familia Simpson es la personificación del pensamiento a corto plazo.


Al rojo vivo

Así es la filosofía del rojo. Como siempre, me encantaría sabe qué pensáis sobre ella. Podéis comentármelo por correo electrónico o en cualquiera de mis perfiles en redes sociales (Twitter, Tumblr, Google+ e Instagram).

Volved la semana que viene para leer el quinto y último artículo sobre las filosofías de los colores, en el que analizaré el verde.

Hasta entonces, ¡escuchad a vuestro corazón y vivid aventuras!


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