¡Bienvenidos a la Semana de Magic Alrededor del Mundo! Estos días vamos a hablar sobre la presencia de Magic a escala global. Una de las cosas que me encantan de mi trabajo es que me ofrece la oportunidad de viajar. En mis veinte años en Wizards, Magic me ha llevado a todos los continentes salvo la Antártida, así que en la columna de hoy he decidido compartir con vosotros seis historias, una ocurrida en cada continente.

Los protagonistas de mis dos primeras anécdotas son los jugadores más fastidiados que jamás he visto en la final de un evento de alto nivel. Curiosamente, los dos son buenos amigos y jugaron juntos durante años en el mismo equipo.

Primera historia: Una final fastidiada (una anécdota de América del Sur)

El segundo Duelist Invitational de la historia (que tuvo lugar años antes de que lo renombrásemos como Magic Invitational) tuvo lugar en Río de Janeiro, Brasil. La competición se organizó en el marco de un Grand Prix y ambos eventos se desarrollaron en un antiguo edificio histórico. El Grand Prix se celebró en un gran vestíbulo de uno de los pisos superiores. Estábamos en pleno verano brasileño y la temperatura no bajó de los 38 grados durante los días que duró el torneo. El vestíbulo no tenía muy buena ventilación y el lugar estaba repleto de jugadores. La única vez que subí a la sala, me dio la impresión de que el evento estuviese jugándose en una sauna.

Mientras, nosotros estábamos abajo, en una sala acristalada, que era la única estancia del edificio con aire acondicionado, y el público estaba apretujándose contra el cristal. En aquel momento, pensaba que solo estaban entusiasmados por ver el evento, pero ahora me doy cuenta de que el cristal probablemente estuviese bastante fresquito. En cualquier caso, los jugadores brasileños se mostraron encantados de hacer de anfitriones y trataron a los participantes del Invitational como si fuesen estrellas del rock.

Quince jugadores se enfrentaron a lo largo de tres jornadas (eran quince porque uno de ellos, Jason Zila, había cancelado su participación a última hora y no pudimos encontrar un sustituto, así que mantuvimos su nombre en los emparejamientos y concedimos byes a quienes fuesen a jugar contra él). Al final, solo quedaban dos contendientes: el checo Jakub Slemr y el estadounidense Darwin Kastle. Jakub Slemr era el campeón mundial en aquel momento. Darwin Kastle había alcanzado el top 8 en muchos Pro Tour, llegando a quedar segundo en el PT Atlanta, el quinto de la historia. Más tarde, Kastle estaría entre los jugadores que inauguraron el Salón de la Fama del Pro Tour.

En aquella época, los dos finalistas del Invitational debían enfrentarse jugando en los cinco formatos del torneo (por si no estáis al corriente, el Invitational era un torneo con liguilla de quince rondas, en la que todos se enfrentaban una vez a cada adversario y el formato cambiaba cada tres rondas). Como cada formato se jugaba al mejor de tres, la final podía prolongarse un tiempo. Yo sabía que Darwin se encontraba un poco mal la jornada anterior a la final, pero al día siguiente, estaba peor. De hecho, se le veía muy fastidiado, pero se presentó a la final de todas formas porque estaba decidido a ganarla y no iba a dejar que nada le detuviese, ni siquiera un virus horrible.

Cuando digo que Darwin estaba fastidiado, no me refiero a que estornudase o tosiese más de lo normal: Darwin se encontraba al borde del desmayo. La verdad, me sorprendió que fuese capaz de levantarse de la cama para ir a la final. El problema era que todo el mundo iba a marcharse al día siguiente (bueno, excepto yo, que me quedé de vacaciones con mi novia, como podéis leer en mi relato acerca de nuestro noviazgo), así que la final no podía aplazarse. Aunque todos los indicios apuntaban a lo contrario, Darwin dijo que podía jugar.

En un momento dado, mientras se jugaba el primer formato, Darwin se giró hacia mí y me preguntó: "¿Podemos hacer descansos durante las partidas?". Le pregunté a qué se refería y me dijo que estaba a punto de vomitar, así que lo mandé a los aseos. Darwin tuvo que ausentarse muchas veces, pero siempre volvía concentrado para jugar. La final llegó hasta el quinto formato y Darwin, por pura fuerza de voluntad, logró vencer en tres de los cinco formatos y ganó el torneo. Luego me entregó la carta que quería crear como premio (que se convertiría en los Jinetes de avalancha) y se fue directo a descansar, hasta que tuvo que levantarse al día siguiente para subir al avión de regreso.

Jinetes de avalancha | Ilustración de Edward P. Beard, Jr.


Segunda historia: Otra final fastidiada (una anécdota de América del Norte)

Darwin Kastle también aparece en la segunda historia de jugadores enfermos durante una final, aunque esta vez no fue el afectado. Ese honor le correspondió a otro miembro del Salón de la Fama: Rob Dougherty. Estábamos jugando el Pro Tour Washington D.C., el primer Pro Tour por equipos. Dougherty formaba parte del Team Your Move Games, junto con Darwin Kastle y Dave Humpherys, otro futuro miembro del Salón de la Fama. El nombre del equipo era el del establecimiento de Dougherty, donde los tres solían jugar. En la final, se enfrentaron al Team Game Empire, compuesto por tres estadounidenses: Kurt Burgner, el antiguo campeón mundial Brian Selden y Alan Comer, futuro miembro del Salón de la Fama.

Reciclaje | Ilustración de Phil Foglio

No estoy totalmente seguro de cómo enfermó Dougherty, pero muchos jugadores padecieron intoxicación alimentaria aquel fin de semana e imagino que también le afectó. O puede que fuese un virus. Sé que se había encontrado bien casi todo el fin de semana, así que me inclinaría por la intoxicación. Fuese cual fuese el motivo, Dougherty estaba para el arrastre cuando llegó el domingo. El evento final fue un Rochester Draft por equipos del bloque La Saga de Urza; es decir, los tres jugadores drafteaban juntos y podían ayudarse a decidir los picks. Dougherty pudo participar en el draft, pero Kastle y Humpherys tomaron todas las decisiones y ayudaron a Rob con su draft.

Durante la construcción de mazos, Dougherty se tumbó en el suelo. Un juez registró su baraja y Kastle y Humpherys la construyeron. Sin embargo, Rob tuvo que jugar su enfrentamiento en la final. Había drafteado un mazo rojo-verde y le tocó jugar contra Brian Selden, que estaba usando un mazo verde-blanco. Normalmente, el verde-blanco tenía ventaja en aquel enfrentamiento, pero Dougherty se había agenciado tanto un Dragón relámpago como una Hidra fundida, lo que le ayudaba bastante.

Como era un torneo por equipos, Team Your Move Games podía ganar aunque Dougherty perdiese, pero Rob se negó a retirarse en la final. Para sorpresa de muchos, Dougherty derrotó a Selden y su enfrentamiento fue el primero en concluir, así que luego fue a ver a Humpherys, que también ganó sus partidas y selló la victoria de Team Your Move Games (por cierto, el público estaba viendo el enfrentamiento de Kastle porque no me permitían retransmitir las partidas de Humpherys contra Alan Comer).

Tercera historia: El nacimiento de un formato (una anécdota de África)

El formato Rotisserie Draft está en boga últimamente y he pensado que sería divertido contar la historia de cómo nació. Cuando creé el Magic Invitational, me pareció interesante aprovechar el evento para dar a conocer formatos ingeniosos y peculiares. Muchos de ellos ya existían, pero también me lo pasé en grande inventando otros, como el Rotisserie Draft.

El evento de esta historia fue el Magic Invitational en Ciudad del Cabo, Sudáfrica.. Todos los Invitational tenían cinco formatos, con la siguiente estructura:


1) Un formato normal de Construido

Uno de los formatos de Construido debía ser uno de los habituales, para que pudiésemos presentar nuevas listas de mazos. En Ciudad del Cabo, decidimos que se jugase Estándar, porque ese formato no se usaba en ningún Pro Tour, excepto en los del Mundial.


2) Un formato peculiar de Construido

Este formato debía exigir a los jugadores que pensasen de forma distinta a la habitual. Normalmente, yo inventaba un formato nuevo para cada ocasión, pero en aquella época había un formato casual muy popular llamado 5-Color (el precursor de Commander, más o menos), así que optamos por él.


3) Un formato de Construido que no requiriese construir mazos

Nos gustaba que hubiese tres formatos de Construido, pero no queríamos molestar a los jugadores pidiéndoles que preparasen tres mazos distintos, así que nosotros mismos brindábamos las barajas en uno de los formatos de Construido. Durante muchos años, este espacio lo ocupó el formato Subasta de ________. En él, se seleccionaban diecisiete mazos, a menudo construidos por el público, y los jugadores del Invitational tendían que pujar por ellos ofreciendo sus vidas y tamaño de mano iniciales. En Ciudad del Cabo, organizamos la primera Subasta del Pueblo, donde el público diseñó mazos construidos en torno a un tipo de criatura específico.


4) Limitado Duplicado

Antes de que el Invitational se organizase online, este formato se jugaba en todos ellos. Se trataba de un formato de Mazo Cerrado en el que los dieciséis jugadores tenían la misma reserva de cartas, diseñada específicamente para el evento. En la mayoría de los Invitational, incluido el de Ciudad del Cabo, yo mismo preparaba las reservas.


5) Un formato de Limitado más exigente

A veces, este espacio lo ocupaba un formato de Limitado ya conocido, como Booster Draft o Rochester Draft. Yo también aprovechaba este espacio para utilizar formatos de Limitado que exigiesen mucha habilidad, como Solomon Draft. Sin embargo, como se iba a jugar 5-Color, el evento no contaría con formatos nuevos, y a mí me gustaba que hubiese al menos uno en todos los Invitational.

Por tanto, mi objetivo era encontrar un nuevo formato de Limitado que pusiese a prueba la habilidad de los competidores. Además, acabábamos de lanzar Odisea y yo quería que el formato diese a conocer la nueva colección. Una de las cosas que suelo hacer durante una lluvia de ideas es pensar en casos extremos. Uno de los que anoté fue "draftear toda la colección". Normalmente, sugerir ideas extremas sirve para abordar un problema desde una perspectiva distinta y encontrar soluciones que quizá no se te habrían ocurrido de otro modo. Sin embargo, cuanto más leía aquella idea, más me gustaba. ¿Por qué no draftearlo todo? Me gustaba aquel concepto novedoso y, además, sería una auténtica prueba de habilidad. Decidí que separaría a los dieciséis jugadores en dos grupos de ocho y que luego dividiría a los participantes en función de la clasificación en el torneo. Por último, decidí que utilizaría el patrón de drafteo serpenteante que se usaba en Rochester Draft y di por creado el formato.

Lo único que me faltaba era ponerle un nombre. Mi objetivo al crear formatos nuevos era que otros jugadores se animasen a probarlos, así que el nombre me parecía importante. Empecé a comprobar formatos de draft en otros juegos y me topé con los Rotisserie del béisbol. Mi idea se parecía a esa modalidad, en el sentido de que podías draftear de toda la reserva, así que tomé prestado el nombre. Para los más curiosos, el nombre "Rotisserie" procede del nombre de un restaurante, La Rotisserie Française, donde los creadores del draft solían reunirse para comer y empezaron a jugar con aquel sistema. Además, todo esto significa que el Rotisserie Draft de Magic no se inspiró en el draft del béisbol, porque yo nunca lo he jugado. Este formato tuvo buena acogida, pero no empezó a destacar hasta más de una década después.

Cuarta historia: El mejor draft de Finkel (una anécdota de Oceanía)

Antes he dicho que en Ciudad del Cabo se organizó la primera Subasta del Pueblo, pero aquel no fue el primer evento Subasta de ________ que se hizo en un Invitational. El formato había nacido un año antes, donde lo utilicé en el Invitational de Sídney, Australia, con un evento conocido como la Subasta de los Campeones. Por aquel entonces, ya había diecisiete mazos de Construido que habían ganado un Pro Tour y/o un Mundial, y los jugadores tuvieron que pujar por ellos. He aquí la lista de campeones:

  1. Zak Dolan (Campeonato Mundial del 94)
  2. Alexander Blumke (Campeonato Mundial del 95)
  3. Michael Loconto (Pro Tour Nueva York del 96)
  4. Olle Rade (Pro Tour Columbus del 96)
  5. Tom Chanpheng (Campeonato Mundial del 97)
  6. Paul McCabe (Pro Tour Dallas del 96)
  7. Michael Long (Pro Tour París del 97)
  8. Jakub Slemr (Campeonato Mundial del 97)
  9. Randy Buehler (Pro Tour Chicago del 97)
  10. David Price (Pro Tour Los Ángeles del 98)
  11. Brian Selden (Campeonato Mundial del 98)
  12. Tommi Hovi (Pro Tour Roma del 98)
  13. Casey McCarrell (Pro Tour Nueva York del 99)
  14. Kai Budde (Campeonato Mundial del 99)
  15. Bob Maher, Jr. (Pro Tour Chicago del 99)
  16. Sigurd Eskeland (Pro Tour Nueva York del 2000)
  17. Jon Finkel (Campeonato Mundial del 2000)

Para pujar por un mazo, había que ofrecer el tamaño de mano y luego el total de vidas con los que se empezaría a jugar. El tamaño de mano era más importante que las vidas, así que una puja de 6 cartas – 20 vidas valía más que una de 7 cartas – 1 vida. Se consideraba que el mejor mazo disponible era el de Tommi Hovi, que había ganado el Pro Tour Roma. Pero claro, la clave del formato no era solo conseguir un buen mazo, sino hacerlo por una puja razonable.

Jon Finkel se había preparado a conciencia para aquel formato y conocía bien todos los mazos y cómo rendían en los emparejamientos. Fue muy activo en las pujas por muchos mazos, pero siempre se plantaba y dejaba que otros se los quedasen. Cuando llegó su turno para nombrar un mazo, escogió el de Zak Dolan para el primer Mundial, y se lo llevó por una puja modesta de 7 cartas – 15 vidas.

El mazo tenía reputación de ser extraño y de usar copias sueltas de cartas como el Canto de sirena y el Druida de Lei, pero Finkel se había percatado de algo que muy pocos de los demás tuvieron en cuenta. Sí, era una baraja con una estructura rara, pero contaba con dos grandes bazas: la primera, que era un mazo de Vintage con cartas muy buenas, y la segunda, como dijo Finkel, que "todas las cartas extrañas funcionaban bien juntas". Sería fácil reírse al ver la lista del mazo, pero la baraja de Zak Dolan funcionó mucho mejor de lo que la gente esperaba.

Finkel lo hizo muy bien en el formato, ganando 3-0. Sin embargo, el auténtico poder del mazo quedó patente en la final, donde Finkel se enfrentó a otro futuro miembro del Salón de la Fama: Ben Rubin. Rubin se había agenciado el mazo monorrojo de Tempestad con el que Dave Price conquistó el Pro Tour Los Ángeles de 1998. Su puja había sido de 7 cartas – 13 vidas, así que había pagado un poco más que Finkel por el mazo de Zak Dolan.

El primer formato que se jugó en la final fue la Subasta de los Campeones. En la primera partida, Finkel empezó y arrancó con un Mox Emerald y un Black Lotus, que le permitieron jugar un Ángel de Serra en primer turno. Rubin calculó que, con robos perfectos, su mazo podría vencer en cuarto turno. Digamos que el enfrentamiento no fue parejo, y Finkel terminó invicto en el formato, pilotando el mazo de Zak Dolan, para luego conquistar el resto del evento. Su premio fue crear el Espía magosombra.

Quinta historia: La auténtica batalla por Mirrodin (una anécdota de Asia)

La siguiente historia tuvo lugar durante el Campeonato Mundial de 2010 en Chiba, Japón. Podría hablar sobre el choque final entre Guillaume y Guillaume, o sobre cómo se produjo el primer empate por el título de Jugador Profesional del Año. Sin embargo, mi historia favorita de este evento ni siquiera formaba parte del Campeonato Mundial, sino que ocurrió en un evento promocional en el que participé una tarde.

Veréis, en los grandes eventos, a menudo organizamos un evento llamado Massive Magic, en el que jugamos una partida con cartas de Magic gigantes, de un metro de altura. Normalmente, los jugadores son dos miembros de Wizards y el público participa en la partida con nosotros. En Chiba, jugué representando al equipo pirexiano y me enfrenté a Richard Garfield, que dirigía al equipo mirrodiano. Tened en cuenta que esto tuvo lugar en diciembre, después del lanzamiento de Cicatrices de Mirrodin, pero antes del de Mirrodin sitiado (de hecho, cada mazo contenía una carta de Mirrodin sitiado, para revelarlas en el evento).

Cada vez que robábamos una carta, pedíamos un voluntario entre el público para que la manejase, realizando cualquier acción que hiciese la carta, como girarse o atacar. Mientras tenía lugar todo esto, otras dos personas comentaban la partida (principalmente, en japonés). Como quizá imaginéis, esta modalidad de juego se presta mucho a lanzarse burlas unos a otros, y si encima añadimos que se estaba representando una guerra entre pirexianos y mirrodianos, las cosas se animaron mucho.

Mi horda pirexiana y yo logramos ponernos por delante al principio. Los mirrodianos consiguieron remontar, pero enseguida volví a inclinar la balanza a favor de los pirexianos. Como parecía que los mirrodianos iban a perder, Richard se pasó a mi bando y reveló que era un agente doble. Entonces, los jueces intervinieron de forma muy cuestionable (yo tenía claro que allí había favoritismos) y permitieron que los mirrodianos equilibrasen la contienda. De pronto, Richard desveló que en realidad era un agente triple y volvió a liderar el bando mirrodiano.

Yo nunca perdí la esperanza y, aunque jugaba contra Richard y todos los jueces, los pirexianos se alzaron con la victoria cuando le di a Richard su décimo y último contador de veneno gigante en japonés (que luego me llevé a casa, donde lo tengo colgado junto a mi escritorio). Al terminar la partida, anuncié: "Todo es uno. Phyrexia se aproxima". En aquel momento, nadie entendió que acababa de proclamar la victoria pirexiana en la guerra que estaba por llegar aquel año.

Aquel evento fue increíblemente divertido y es mi recuerdo favorito de todos los Mundiales.

Sexta historia: Barajar y más barajar (una anécdota de Europa)

El primer Pro Tour europeo tuvo lugar en París, donde Mike Long se hizo con la victoria gracias a su mazo de combo Prosperous Bloom. Long es uno de los protagonistas de esta historia, pero no ocurrió durante la final (donde se enfrentó a Mark Justice); esta anécdota sucedió durante los cuartos de final. En aquella época, yo trabajaba como productor de las rondas finales y una de mis tareas era decidir qué enfrentamientos seguiríamos. En cuartos de final, tuve claro cuál sería el primer duelo que comentaríamos: el del estadounidense Mike Long contra su compatriota Jason Gordon.

Este choque era interesante porque tanto Long como Gordon tenían reputaciones cuestionables, y muchos jugadores disfrutaban especulando cuál de los dos tendría el comportamiento más turbio. A veces, podemos presenciar enfrentamientos entre dos héroes, y otras, entre dos villanos; pues bien, esto era un duelo de "villanos" en toda regla. A muchos jugadores les encantaba ponerse en contra de los villanos, así que solíamos mostrar sus partidas. Sin embargo, esa vez íbamos a mostrar una partida entre dos villanos y el público tendría que decidir a cuál apoyar.

Moldeabatalla boros | Ilustración de Zoltan Boros

Voy a explicaros cómo hacíamos la cobertura en aquellos tiempos: mis comentaristas y yo estábamos en una cabina y teníamos conexión directa con el coordinador, a quien yo indicaba por dónde íbamos a empezar y qué enfrentamientos comentaríamos después. Pues bien, esa vez íbamos a comenzar por Long y Gordon. Los dos se pusieron a barajar con ahínco, porque ninguno se fiaba del otro. Estaba claro que iba a llevarles un rato, así que decidí pasar a otro enfrentamiento.

Cada vez que terminaba una partida, comprobábamos cómo iban Long y Gordon. Seguían barajando. El primer enfrentamiento que estábamos comentando había terminado... y como Long y Gordon seguían sin empezar, nos pusimos a seguir un segundo duelo. Aquel cruce también concluyó, así que volví a ver si habían empezado. Estaban discutiendo algo sobre la forma de barajar y el juez principal tuvo que intervenir. Visto lo visto, empezamos a comentar el tercer enfrentamiento de cuartos de final. Y también terminó. Cuando volvimos a centrarnos en el choque entre Long y Gordon, descubrimos que sí, que por fin estaban listos para empezar a jugar.

La vuelta al mundo en 3000 palabras

Y así concluyen mis anécdotas alrededor del mundo. Espero que hayáis disfrutado con estas historias sobre Magic en todos los continentes, excepto el glacial. Como siempre, me gustaría conocer vuestras opiniones. ¿Os gustan estos artículos que recopilan pequeñas historias? Tanto si disfrutáis con ellos como si no, hacédmelo saber por correo electrónico o en cualquiera de mis perfiles en redes sociales (Twitter, Tumblr, Google+ e Instagram).

Volved la semana que viene, en la que regresaré a una etapa muy, muy remota.

Hasta entonces, espero que disfrutéis viajando por el mundo y recopilando vuestras propias historias.


“Drive to Work #228 – Legendary”

Este podcast trata sobre el supertipo legendario y su trayectoria en la historia de Magic.

“Drive to Work #229 – Dark Ascension, Part 1”

Esta es la primera entrega de una serie de cuatro partes sobre el diseño de Ascenso siniestro.